La importancia de trabajar considerando la comunicación como un recurso para la educación, la formación y la evangelización, reside en la posibilidad concreta de buscar respuesta al interrogante de hoy: ¿Cómo orientar la formación a la vida religiosa en el contexto de un escenario en constante cambio? para responder a este interrogante, tenemos que profundizar en dos aspectos: la FORMACION y la RELACION que las nuevas generaciones mantienen con los media.En cuanto se refiere a la formación, es importante que los educadores y los comunicadores tomen conciencia que es posible conciliar lenguajes, modalidades comunicativas y educativas. En cuanto a la relación jóvenes - media, precisamente se identifica en la generación de la pantalla, el motor del cambio en el estilo y en la práctica del comunicar, mayormente abierta y disponible a "en red", a socializar, a implicarse en la participación y en la ciudadanía.
Querida Sor Edith:
ResponderEliminarTu pregunta sobre cómo formar hoy a la FMA y a la gente joven que va entrando en nuestro Instituto para la misión entre los jóvnes es muy importante y por eso me atrevo a intentar una respuesta. TAmbién yo he sentido fuertemente este desafío. Creo que ante todo el formador o formadora es aquella persona que conoce los caminos por donde guiar y acompañar a al formanda, Luego esto nos requiere el esfuerzo por sintonizar y en cierto modo lograr en nuestra vida ese "nuevo modo de pensar, de ver, de actuar, de relacionarse, de interactuar" que nos exigen las NTCs y tratar de vivir desde esa nueva manera para lograr comunicarnos con nuestras formandas en sulenguaje. Es realment eun desafío. Está todo por hacerse en este orden de cosas en la formación.Pero como la obra es de Dios sigamos buscando caminos implorando la luz del espíritu y comprometiéndonos en continuar la búsqueda.